
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, afirmó que la reforma electoral propuesta por su gobierno no tiene la intención de eliminar al Instituto Nacional Electoral (INE) ni de subordinarlo al Poder Ejecutivo. Durante su conferencia matutina, enfatizó que este órgano electoral conservaría la autonomía otorgada en 1996.
“El INE mantiene su autonomía. Padrón Electoral, Lista Nominal, todo sigue perteneciendo a los ciudadanos, porque en realidad pertenece a los ciudadanos, pero es una atribución del Instituto Nacional Electoral”, señaló. Uno de los objetivos principales de la reforma, según explicó, es reducir el gasto en elecciones y en partidos políticos.
“No es necesario, para garantizar la democracia, que se destinen tantos recursos”, subrayó Sheinbaum. Al referirse a la representación proporcional, calificó como negativa la figura de los plurinominales. Recordó que esta figura se creó para asegurar la presencia de las minorías, aunque con el tiempo, el número de diputados plurinominales aumentó, beneficiando a todos los partidos, incluso a las mayorías.
“No quiere decir desaparecer la representación de las minorías, ni mucho menos, pero sí revisar por qué tienen que ser tantos diputados y por qué hay partidos que ganan un diputado y tienen 17”, expresó.
Ante la pregunta sobre si apoyaría abaratar las elecciones federales de 2030 y que la credencial electoral se digitalice para permitir el voto electrónico, la presidenta se mostró abierta al debate: “Hay países donde hay voto electrónico y al mismo tiempo te dan un boleto que dice que ‘votaste’, una garantía de que votaste. Entonces, ¿por qué nosotros no podemos discutir eso? Todo está abierto”, comentó.