
Francia está buscando ajustar los requisitos de capital para los principales prestamistas de la zona euro, con el objetivo de equipararlos con sus competidores estadounidenses. Esta información se ha obtenido de un documento al que ha tenido acceso Reuters.
La iniciativa planteada por los reguladores franceses apunta a los siete bancos de importancia global en la región, entre los que se incluyen cuatro entidades francesas, así como otros bancos cuyo balance supere los 100,000 millones de euros (equivalentes a aproximadamente 117,000 millones de dólares).
En virtud de este plan, que no se había divulgado previamente, los grandes bancos europeos pasarían a estar sujetos a un solo requisito de capital para abordar pérdidas en caso de quiebra, frente a los dos que se aplican actualmente. Estos requisitos se establecieron hace aproximadamente una década con la intención de evitar una repetición de la crisis financiera de 2008. Sin embargo, ahora, están bajo revisión como parte de una tendencia hacia la desregulación promovida por Estados Unidos durante la presidencia de Donald Trump.
El documento evidencia preocupaciones en Francia sobre las ventajas que los bancos estadounidenses podrían tener respecto a las entidades de la Unión Europea. La propuesta no busca reducir los requisitos, sino más bien racionalizarlos para lograr una mayor equidad en el sector financiero internacional.