Un informe de Causa en Común, titulado “Galería del horror: atrocidades y eventos de alto impacto registrados en medios periodísticos”, revela datos alarmantes sobre la violencia en México durante el primer semestre de 2025. Según el informe, se registraron al menos 2,517 crímenes de extrema violencia, clasificados como atrocidades, lo que da un promedio de 14 casos y 18 víctimas diarias, totalizando 3,266 víctimas.
Entre los crímenes más documentados se encuentra el asesinato con tortura, con al menos 704 casos reportados. Le siguen la componente de mutilación, descuartizamiento y destrucción de cadáveres, con 260 registros, y el asesinato de mujeres con crueldad extrema, que suma al menos 256 eventos. Estos datos, según la organización, evidencian patrones de violencia que no solo son frecuentes sino también marcadamente crueles.
Además, se documentaron 200 masacres, lo que supone al menos una masacre diaria durante este periodo. A esto se suman 158 fosas clandestinas y otros crímenes, como calcinamientos (98), asesinatos de funcionarios o actores de seguridad (114), y violencia contra migrantes.
Sinaloa lidera la lista de entidades con más atrocidades, reportando 374 casos, seguido de Guanajuato (267), Guerrero (191), Michoacán (181), Puebla (149) y Jalisco (144). Causa en Común señala que las cifras en estas áreas reflejan no solo una alta incidencia de violencia, sino también la repetición de crímenes particularmente crueles y deshumanizantes.
En contraste, los estados con menor número de atrocidades fueron Yucatán y Querétaro, con solo cuatro cada uno; seguidos de Durango (10), Coahuila (12) y Ciudad de México (12).
En términos de víctimas, Sinaloa también ocupa el primer lugar, con al menos 428 personas afectadas, seguido de Guanajuato (397), Jalisco (287), Guerrero (228) y Chihuahua (211). Los meses más violentos fueron enero, marzo y febrero, con más de 600 víctimas registradas en cada uno, aunque incluso en los meses con menor registro, como mayo y junio, las cifras superaron las 470 víctimas mensuales.
La organización llamó a fortalecer la atención a víctimas, documentar rigurosamente estos eventos y promover estrategias comunitarias de prevención. Además, subrayó la importancia de que la ciudadanía exija justicia y verdad, ante un escenario que ha marcado los primeros seis meses del año.
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