El peso mexicano experimentó una depreciación por tercer día consecutivo este martes, en medio de un fortalecimiento generalizado del dólar. Este movimiento se dio luego de que en Estados Unidos se publicara un informe que reveló un incremento esperado de los precios al consumidor.
Según datos del Banco de México (Banxico), la moneda mexicana cerró en 18.8188 pesos por dólar, lo que representa una depreciación del 0.48%. Con este resultado, el peso acumula un retroceso del 1.08% en tres jornadas consecutivas de pérdidas frente al dólar.
La apreciación del dólar estadounidense, que avanzó un 0.41% según su índice ponderado, alcanzó su punto más alto desde el 23 de junio. Este fortalecimiento se debe, en gran parte, a la reciente publicación del informe sobre inflación al consumidor en Estados Unidos. La inflación mensual se situó en 0.29%, acelerándose desde el dato de mayo (0.08%) y siendo la más elevada desde enero.
Wall Street, por otro lado, mostró un comportamiento mixto en las operaciones de este martes. El índice Nasdaq alcanzó nuevos máximos gracias a NVIDIA, mientras que otros índices cotizaban a la baja mientras procesaban las cifras de inflación.
El Promedio Industrial Dow Jones, que incluye acciones de 30 grandes empresas, cayó un 0.98% hasta los 44,023.29 puntos. El S&P 500, que abarca las empresas más valiosas, retrocedió un 0.40% hasta 6,243.76 puntos. Sin embargo, el Nasdaq Composite, del sector tecnológico, avanzó un 0.18% alcanzando las 20,677.80 unidades.
Este avance en el Nasdaq marcó la cuarta sesión de cinco en la que dicho índice cerró en máximos históricos, y la octava desde el 27 de junio. El desarrollo del sector tecnológico fue impulsado principalmente por NVIDIA, que vio un aumento en sus acciones tras anunciar planes para reanudar las ventas de su semiconductor H20 a China. Las acciones de NVIDIA subieron un 4.01%, situándose en 170.65 dólares, lo que elevó su capitalización a 4.17 billones de dólares.
Mientras tanto, el bitcoin registró un retroceso durante la jornada. Esto después de que la legislación sobre criptomonedas en el Congreso de Estados Unidos se tornara incierta tras el rechazo de una votación de procedimiento que habría permitido el avance de varios proyectos de ley sobre activos digitales.