En un giro contrario a lo prometido por el gobierno de Claudia Sheinbaum, el próximo año 2026 verá un incremento y la introducción de nuevos impuestos. El paquete económico propuesto contempla aumentos en los impuestos al consumo de refrescos, tabaco, apuestas, videojuegos con contenido violento y al ahorro. Se estima que estas medidas generarán 41,000 millones de pesos bajo el concepto de impuestos saludables.
Los consumidores se enfrentarán a incrementos relacionados con los llamados "pecados del azúcar y el ocio". El gobierno ha propuesto que el consumo de refrescos, tanto con como sin azúcar, incremente en 3.08 pesos adicionales por litro. Los fumadores verán un aumento en el costo del tabaco, que podría oscilar entre un 160% y 200%. Quienes disfrutan de las apuestas tendrán un aumento del 30% al 50%, mientras que los videojuegos con violencia costarán un 8% más.
Asimismo, las personas que ahorran también se verán afectadas. El impuesto al ahorro se incrementará del 0.50% al 0.90% en 2026. De ser aprobada la iniciativa, el impuesto retenido por las instituciones financieras a los ahorradores experimentará un aumento del 80%, impactando a quienes obtienen intereses por inversiones en CETES, bonos, pagarés, entre otros instrumentos de deuda.
Adicionalmente, las Fintechs deberán ajustarse a nuevas regulaciones. En un movimiento para establecer igualdad de condiciones con los bancos tradicionales, se requerirá que estas plataformas retengan el Impuesto Sobre la Renta (ISR) y el Impuesto al Valor Agregado (IVA).
El proyecto de la Ley de Ingresos para el próximo año fiscal prevé cambios en la Ley de Derechos, el Código Fiscal y la Ley del Impuesto Especial a Productos y Servicios (IEPS). El gobierno justifica los aumentos de los impuestos saludables como medidas para favorecer la **salud pública**, aunque este enfoque también impactará directamente a los consumidores.