La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) expresó su desaprobación el domingo en relación con los “actos de destrucción y saqueo” perpetrados por un grupo de encapuchados en el Centro Cultural Universitario. Estos actos ocurrieron durante la segunda marcha contra la gentrificación en la Ciudad de México.
En un comunicado, la UNAM explicó que un subgrupo de individuos se apartó del contingente principal de la marcha, dirigiéndose hacia Ciudad Universitaria. Allí, causaron daños en casetas de vigilancia, en el Museo Universitario Arte Contemporáneo (MUAC) y en la librería Julio Torri.
La universidad detalló que los involucrados actuaron “con violencia” al atacar instalaciones universitarias consideradas “emblemáticas” debido a su importancia en la promoción de arte, literatura y reflexión crítica.
Las autoridades universitarias han iniciado una evaluación de los daños y han señalado que procederán con denuncias formales ante las autoridades capitalinas, buscando que se investigue y sancione a los responsables de estos actos.
La UNAM subrayó su respeto por la libertad de expresión y el derecho a la manifestación pacífica, pero remarcó su rechazo total hacia cualquier forma de violencia. “La UNAM reitera su vocación como un espacio de libertad, pluralidad y defensa de los derechos de expresión y manifestación pacífica; nunca compartirá la violencia, la agresión y la intolerancia como vías de expresión”, afirmó la institución.
En cuanto al contexto de la marcha, el Gobierno de la Ciudad de México comunicó que cerca de 600 personas participaron en la segunda marcha contra la gentrificación. Los manifestantes recorrieron un trayecto desde la estación del Metrobús Fuentes Brotantes hasta la estación El Caminero y posteriormente hasta Ciudad Universitaria, “sin mayores incidentes”.