La Casa Blanca dio a conocer el miércoles un plan estratégico destinado a potenciar el desarrollo de la inteligencia artificial (IA) en Estados Unidos, así como su exportación y la eliminación del "sesgo ideológico" en los chatbots.
Con la intención de catalizar un auge de la IA en la nación, el presidente Donald Trump había anunciado en julio inversiones significativas en infraestructura y producción energética, consideradas cruciales para el avance de esta tecnología.
"El presidente Trump ha señalado que el avance e incluso el dominio de Estados Unidos en materia de inteligencia es una prioridad nacional", comentó David Sacks, asesor principal de la Casa Blanca para la IA, durante una conferencia de prensa telefónica.
"Estamos inmersos en una carrera a escala mundial para tomar la delantera en IA", explicó Sacks, "y queremos que Estados Unidos gane esa carrera".
El plan de acción es fruto de una extensa consulta a profesionales, investigadores y usuarios, que comenzó en febrero.
Trump busca distanciarse de la estrategia seguida por su predecesor, Joe Biden, quien abogaba por un desarrollo controlado de la IA, centrándose en la seguridad y la comprensión de los riesgos asociados.
La Casa Blanca ha identificado alrededor de 90 medidas que se implementarán "en las próximas semanas y meses", de acuerdo con un comunicado oficial.
Está previsto que el mandatario firme este miércoles tres decretos en un evento sobre IA, organizado en Washington, según informó la portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt.
La estrategia gubernamental se basa en tres pilares fundamentales. El primero busca facilitar la construcción de nuevos centros de datos, indispensables para el funcionamiento de la IA, así como la realización de proyectos energéticos de gran envergadura para satisfacer sus elevadas demandas eléctricas.
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