
La inmigración es un activo "crucial" para la economía de Estados Unidos, según declaraciones del economista jefe de la OCDE, Álvaro Pereira, a la agencia AFP. Esto ocurre en un contexto donde Washington ha endurecido las restricciones a los visados en el sector tecnológico y intensificado las medidas contra los inmigrantes irregulares.
Pereira, quien pronto dejará su cargo para asumir como gobernador del Banco de Portugal, también comentó sobre los efectos retardados de los aranceles impuestos por Estados Unidos a sus socios comerciales en el crecimiento global.
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), con sede en París, ha ajustado al alza sus previsiones de crecimiento global, proyectando un 3,2% para 2025. No obstante, advirtió sobre la presencia de varios indicadores de desaceleración económica.
Ante la pregunta sobre si el aumento en la previsión de crecimiento mundial para 2025 refleja un menor pesimismo sobre los aranceles estadounidenses en la economía, Pereira respondió:
El impacto de los aranceles tarda más en sentirse en la economía, en parte porque muchas empresas en varios países anticiparon estos aranceles antes de su implementación. Esto las llevó a actuar y a exportar a Estados Unidos y otros países para esquivarlos.
Sin embargo, ya se observa un crecimiento más bajo y una inflación más alta de lo previsto.
Pereira añadió que, en un contexto de crecimiento económico positivo, las tasas suelen situarse alrededor del 4%, dejando claro que actualmente estamos lejos de esas cifras.