La recaudación tributaria en México mostró un crecimiento continuo en las finanzas públicas, a pesar del debilitamiento de los ingresos petroleros y la búsqueda de consolidación fiscal en un contexto de incertidumbre económica. Según informó la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), de enero a mayo de este año, los ingresos tributarios ascendieron a 2 billones 411,895 millones de pesos, lo que representa un incremento anual del 8.9%.
En contraste, durante el mismo periodo, los ingresos por petróleo sumaron 375,217 millones de pesos, evidenciando una caída del 23.8% en comparación con los primeros cinco meses del año previo.
“La recaudación tributaria creció un 8.9% real anual en el periodo enero-mayo, el mayor incremento para este lapso desde 2016. Este desempeño fue impulsado principalmente por la recaudación de IVA (12.5% real) y del ISR (8.2% real), además de un aumento sólido en los conceptos recaudados por aduanas, lo que refleja tanto la solidez del mercado interno como una mayor eficiencia recaudatoria”, indicó la dependencia dirigida por Edgar Amador Zamora.
Por otro lado, el Informe de Finanzas Públicas y la Deuda Pública de Hacienda mostró que la menor recaudación petrolera se debió a que no se alcanzaron las metas previstas en este sector, un déficit que apenas pudo ser mitigado por un tipo de cambio más favorable.
En términos de gasto público, el gobierno de Claudia Sheinbaum mantuvo subejercicios. En el periodo evaluado, se dejaron de gastar 224,387 millones de pesos que estaban presupuestados.
El gasto total ejercido alcanzó los 3 billones 722,604 millones de pesos, registrando una caída anual del 5.3%.
“En cumplimiento con las metas fiscales, el gasto público disminuyó un 5.3% real anual, observándose un ejercicio eficiente del gasto, con un avance del 94.3% respecto a lo programado, lo que aseguró la provisión de programas sociales, infraestructura y servicios públicos”, aseguró Hacienda.