
La inflación en Japón se moderó a 2.7% en agosto, una ligera disminución respecto al 3.1% registrado en julio, de acuerdo con los datos oficiales publicados el viernes.
Según el ministerio de asuntos internos, esta cifra, que excluye los precios volátiles de alimentos frescos, se ajustó a las expectativas del mercado.
A pesar de esta moderación, la tasa de inflación sigue superando el objetivo del 2% establecido por el Banco de Japón, lo que aumenta las expectativas de un posible aumento en los tipos de interés por parte de la entidad.
Un factor que sigue influyendo en la inflación japonesa es el precio del arroz, que experimentó un incremento del 68.8% en comparación con el año anterior, después de observar aumentos de alrededor del 100% en junio y del 90.7% en julio.
Taro Kimura, analista de Bloomberg Economics, comentó que la disminución en la inflación "no cambiará el panorama general". Según Kimura, "los precios al consumidor seguirán lo suficientemente altos como para que el Banco de Japón siga su plan de reducir estímulos, probablemente en octubre".