El gobierno actual de Alejandro Armenta ha implementado acciones concretas y mantiene un diálogo continuo para fortalecer el trabajo de la Comisión de Búsqueda en Puebla. Estas iniciativas se dirigen a apoyar a las madres que buscan a sus seres queridos.
En Ciudad de Puebla, la búsqueda de personas desaparecidas se ha transformado en una responsabilidad compartida entre la sociedad y el gobierno, destacándose por la receptividad hacia las voces de las madres buscadoras.
A lo largo de los 256 días de gestión, se han llevado a cabo cuatro reuniones de trabajo en las que han participado diversas mujeres que continúan con la búsqueda de sus hijos a través de colectivos de madres. El gobernador Alejandro Armenta ha reafirmado su compromiso de estar presente, no solo en discursos, sino también a través de un acompañamiento significativo.
Bajo el liderazgo de Juan Enrique Rivera Reyes, la Comisión de Búsqueda ha conseguido avances significativos. Esta estrategia conjunta reúne esfuerzos de campo, gabinete y colaboración interinstitucional con fiscalías locales y federales. El enfoque integral del trabajo ha permitido encontrar a personas incluso después de años de ausencia.
Desde diciembre de 2024, la Comisión ha registrado 427 casos de personas desaparecidas; 371 de estas personas han sido localizadas, de las cuales 73 fueron encontradas tras varios años. Se han realizado más de 1,300 búsquedas de campo y más de 10,800 acciones de gabinete, trabajando en conjunto con fiscalías estatales y federales.
La administración de Alejandro Armenta pone especial énfasis en las historias individuales detrás de cada caso. Para mejorar el proceso, se ha reforzado la capacitación del personal y se han abierto canales de comunicación permanente, atendiendo observaciones de los colectivos. Asimismo, se han fortalecido espacios de atención para mujeres y familias afectadas por la violencia.
Las Madres Buscadoras, integradas en colectivos como “Voz de los Desaparecidos”, han subrayado la importancia de acompañar la voluntad de buscar con profesionalismo y continuidad. Según una portavoz, “la esperanza no basta sin resultados concretos”. Otros familiares han destacado la necesidad de centrar los procedimientos en la sensibilidad humana.
El gobernador se ha comprometido a mantener al personal capacitado, asegurar los recursos necesarios y programar reuniones regulares para evaluar el progreso y corregir las deficiencias encontradas.