
La Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro de Estados Unidos ha anunciado una nueva serie de sanciones financieras dirigidas contra la facción llamada Los Mayos del Cártel de Sinaloa. Estas sanciones también incluyen a individuos y empresas que, según el gobierno estadounidense, forman una red dedicada a operaciones y lavado de dinero en Playas de Rosarito, Baja California.
Entre los individuos señalados se encuentra Hilda Araceli Brown Figueredo, exalcaldesa de Rosarito y miembro de Morena. La OFAC le atribuye presuntos vínculos políticos con operadores del cártel, sugiriendo que podría haber influido en el gobierno municipal.
Actualmente, Araceli Brown se desempeña como diputada federal por el Distrito 9 de Baja California y es parte de la bancada de Morena en la cámara baja.
Los Mayos, también conocidos como ‘La Mayiza’, son una facción del Cártel de Sinaloa liderada por Ismael Zambada Sicairos, alias “El Mayito Flaco”, hijo de Ismael “El Mayo” Zambada García, un notorio capo del narcotráfico actualmente detenido en Estados Unidos.
Esta facción ha mantenido violentos enfrentamientos con Los Chapitos, otra división del cártel, especialmente después de un supuesto incidente el año pasado donde Joaquín Guzmán López, hijo de El Chapo, habría entregado a El Mayo Zambada a las autoridades estadounidenses.
La acción del Tesoro, anunciada durante una visita del subsecretario para Terrorismo e Inteligencia Financiera John K. Hurley a la frontera, designa a Los Mayos y a su líder de brazo armado como objetivos principales de las sanciones. Adicionalmente, se incluyó a cinco personas y 15 empresas a la ‘lista negra’ del Tesoro, ligadas, según OFAC, a una red que opera al sur de la frontera con Estados Unidos. Esto también incluye a un presunto líder asociado con la producción de fentanilo.
Rosarito, por su proximidad a la frontera con California, es descrita por el Departamento del Tesoro como “una arteria clave” para el contrabando de drogas hacia Estados Unidos. Además del tráfico de sustancias, Los Mayos son acusados de participar en actividades como secuestros, extorsiones, lavado de dinero y corrupción gubernamental.
En palabras del subsecretario Hurley, citadas por el Tesoro: “El Cártel de Sinaloa es una organización terrorista extranjera que continúa traficando narcóticos, blanqueando sus ganancias y corrompiendo a funcionarios locales”.
El comunicado también subraya que “la medida de hoy […] demuestra la dedicación del Tesoro a la prioridad del presidente Trump de frenar las amenazas transfronterizas”, destacando tanto la justificación política como de seguridad nacional detrás de estas acciones financieras de Washington.