El día de hoy, Donald Trump fue investido como el 47.º presidente de los Estados Unidos en una ceremonia celebrada en el Capitolio de Washington, D.C. Este evento marca su regreso a la Casa Blanca tras haber ganado las elecciones presidenciales del pasado noviembre, sucediendo a Joe Biden en el cargo. Esto, más allá de inaugurar un nuevo capítulo para el país, es un hito, pues Trump se convierte en el primer mandatario sentenciado en asumir el cargo por segunda vez no consecutiva.
Durante la ceremonia, Trump prestó juramento ante el juez John Roberts. Utilizando la Biblia que perteneció a su madre y la de Abraham Lincoln, Trump se comprometió a cumplir con la Constitución de los Estados Unidos y a velar por la seguridad del país. Por su parte, J.D. Vance, vicepresidente de la nueva administración, también realizó el juramento correspondiente para suceder a Kamala Harris.
Entre los asistentes se encontraban figuras prominentes como Elon Musk y Jeff Bezos, así como expresidentes como Barack Obama y George W. Bush.
En su primer discurso como presidente, Trump se dirigió a la nación con un mensaje optimista y contundente. "La Era de Oro de Estados Unidos comienza ahora", afirmó, asegurando que "el declive ha terminado" y que su administración se enfocará en restaurar la grandeza del país.
En la misma línea, Trump recordó el atentado que sufrió en 2021, declarando que "fue salvado por Dios para guiar a Estados Unidos a ser grandes de nuevo".
Ese fue el parteaguas para uno de los puntos más destacados de su discurso, en el que anunció que declarará una emergencia nacional en la frontera sur con México, lo que le permitirá implementar medidas más estrictas contra la inmigración ilegal. "Regresaremos a millones y millones de inmigrantes criminales a dónde llegaron", prometió, subrayando su intención de bloquear todas las entradas ilegales al país. De la misma forma, declaró que los cárteles mexicanos serán designados como organizaciones terroristas. También anunció su intención de usar la ley de agentes extranjeros de 1798 para desmantelar pandillas operativas en Estados Unidos, incluyendo al Tren de Aragua de Venezuela y a la MS-13 de El Salvador.
Además, anunció que planea revivir el programa "Quédate en México", el cual obliga a los solicitantes de asilo a esperar en México mientras se resuelven sus casos. Esta política había sido suspendida por Biden al asumir el poder en 2021.
Fiel a su línea de campaña, Trump también adelantó en el Capitolio que "a partir de hoy, la política gubernamental de Estados Unidos es que hay solo dos géneros: masculino y femenino"
Además, afirmó que pondrá fin “a la política gubernamental de intentar diseñar la raza y el género en cada aspecto de la vida pública y privada”, sumándose su declaración al anuncio de una serie de órdenes ejectuivas que, de acuerdo a un funcionario de su administración, pondrían fin a los programas federales para el reconocimiento de la diversidad sexual, entre ellos, a la política oficial que reconocía un tercer género, determinado por una X.