El Día Mundial de la Población fue establecido por el Consejo de Administración del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo en 1989. Esta fecha se origina a partir del "Día de los cinco mil millones" el 11 de julio de 1987, momento en que la población mundial alcanzó esta cifra.
Desde 1990, la Asamblea General de las Naciones Unidas ha mantenido el Día Mundial de la Población. El objetivo es aumentar la conciencia sobre los temas de población y su relación con el medio ambiente y el desarrollo.
En 2025, se estima que nacerán en México 2,019,907 personas y fallecerán 836,585, reflejando una tasa lenta de crecimiento poblacional. Según datos del Consejo Nacional de Población (Conapo), la población mexicana crecerá de 133.4 millones de habitantes a 138 millones para 2030. No obstante, se proyecta que en 2052 se alcance un máximo de 147 millones, seguido de un descenso por la baja en la tasa de fecundidad.
La conmemoración de este año se centra en el lema: “Empoderar a la juventud para que puedan formar las familias que desean en un mundo justo y lleno de esperanza”. Esto se da en un contexto donde las tasas de fertilidad disminuyen. Sin embargo, el informe sobre el Estado de la Población Mundial del Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) sugiere que la verdadera crisis es que muchas personas desean tener hijos, y algunos desean más de los que pueden tener.
Los líderes mundiales deben priorizar las necesidades y opiniones de los jóvenes, quienes enfrentan desafíos como la desigualdad de género, la crisis climática, la inseguridad económica y el acceso limitado a recursos.