CI Banco, Intercam y Vector Casa de Bolsa han enfrentado recientemente una seria acusación por parte del Departamento del Tesoro de Estados Unidos. Estas instituciones financieras mexicanas fueron señaladas por presuntamente estar vinculadas con cárteles de la droga y colaborar en actividades de lavado de dinero, relacionadas específicamente con el financiamiento del tráfico de fentanilo.
A pesar de que el gobierno mexicano ha declarado que no existen pruebas que respalden estas acusaciones, las autoridades financieras locales tomaron la decisión de intervenir gerencialmente en estas entidades, apenas unas horas después de que se hicieran públicos los señalamientos.
Las implicaciones son significativas para CI Banco, Intercam y Vector Casa de Bolsa, ya que una inminente sanción podría entrar en vigor en 21 días. Esta sanción impediría a las instituciones financieras de Estados Unidos realizar operaciones con las mexicanas. La medida se suma al relevo operacional y administrativo en los bancos y casa de bolsa afectados, impactando así su principal activo: la reputación.
La acusación del Departamento del Tesoro representa un fuerte golpe, sembrando la duda sobre la integridad de estas instituciones. Aunque la intervención gerencial se presenta como un esfuerzo por proteger a los ahorradores y clientes, también sugiere la existencia de un riesgo potencial, lo que ha generado inquietud y podría representar un toque de muerte para estas entidades.
El impacto inmediato de estas acusaciones ya se siente. Según el secretario de Hacienda, Edgar Amador, las instituciones implicadas ya estaban enfrentando problemas de financiamiento. Tras un monitoreo intensivo, se decidió intervenirlas temporalmente, con el fin de evitar una interrupción en el sistema bancario y proteger el ahorro de los clientes.