La amenaza del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de implementar un arancel del 30% a las importaciones provenientes de la Unión Europea está añadiendo complejidad a las decisiones del Banco Central Europeo (BCE). No obstante, se anticipa que esto no descarrile los planes del BCE para realizar una pausa en los recortes de tasas la próxima semana, según informaron cinco miembros del Consejo de Gobierno del BCE a Reuters.
El BCE ha indicado que probablemente mantendrá las tasas de interés durante la reunión de julio. Aun así, el arancel propuesto por Trump, que asciende al 30%, supera las previsiones del BCE, incluso en el escenario más adverso para la economía de la zona euro, presentado el mes pasado. Esto ha obligado al BCE a replantear sus estimaciones y a los responsables políticos a contemplar un panorama más negativo del que inicialmente se consideró en junio, indicaron las fuentes.
A pesar de esto, los gobernadores del BCE muestran reticencia a tomar acciones basadas en lo que todavía es solo una amenaza, sobre todo ante las declaraciones contradictorias que han surgido ocasionalmente de la administración de Trump desde su primer anuncio de aranceles globales en abril. Las fuentes señalaron que es probable que cualquier discusión sobre recortes en las tasas de interés se postergue hasta la reunión de septiembre del BCE.
Trump anunció el domingo que estos aranceles entrarían en vigor el 1 de agosto, mientras que la Comisión Europea ha decidido aplazar sus contramedidas hasta esa misma fecha. Los economistas del mercado han expresado que ven como improbable que Trump lleve a cabo su amenaza arancelaria.
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